Junior se acerca ala estrella de diciembre, después de golear al deportes Tolima 3 goles por 0, en el juego de ida de la final de la Liga BetPlay, en medio de una fiesta maravillosa de los más de 45 mil aficionados que asistieron al estadio Metropolitano.
José Enamorado fue la gran figura del compromiso, fue el autor de dos de los tres goles del equipo Tiburón, mientras que Brayan Castrillón, se apunto el otro tanto del equipo dirigido por Alfredo Arias.

La etapa inicial comenzó totalmente favorable para Junior. Desde el primer minuto se vio lo que podía ser el partido: un Enamorado enchufado e incontrolable y una defensa visitante titubeante y acosada.
‘El Tiburón’ salió a comerse vivo al ‘Pijao’ y a los 4 minutos ya estaba masticando el primer bocado de alegría, un golazo, un señor gol, uno de museo, uno para Puskas. ¡Un pepazo de Enamorado!
El extremo barranquillero recibió un pasesote largo de Paiva, que hizo gala de inteligencia y precisión, agarró el balón, eludió a Junior Hernández con un vistoso amague como de taquito y se quitó de encima a Rovira con otra finta. A los dos los dejó desparramados antes de apretar el gatillo y perforar el ángulo superior derecho de Neto Volpi, cuyo esfuerzo y estirada fueron en vano.
El ‘Metro’ estalló extasiado por esa encantadora anotación. Un arranque espectacular que incrementó los nervios de un Deportes Tolima, que solo se apoyaba en el carácter de Marlon Torres.
El resto del cuadro pijao, a pesar de las permanentes indicaciones de Lucas González en el zona técnica y las pausas por el humo de las bengalas que se apoderaba del estadio, estaba intimidado y atormentado.
Jesús Rivas, a los 13 minutos, casi pone el 2-0, pero su pique al espacio para aprovechar una brillante asistencia de Chará, y su posterior remate, se quedó en las manos de providenciales de Volpi. El guardameta brasileño evitó un 2-0 tempranero.
Después de unos 20 minutos dominantes e intensos de los rojiblancos, empezaron a sentir algo de cansancio, y Tolima poco a poco comenzó a acercarse con peligro en el área de Mauro Silveira.
El uruguayo ahogó el grito de gol, con ayuda del palo derecho, ante un cabezazo certero de Adrián Parra, y Juan Pablo Nieto, también de frentazo, desperdició en solitario una inmejorable oportunidad de marcar.
Esas dos opciones y otras aproximaciones, principalmente a través de tiros de esquina y cobros de costado, generaron un tris de incertidumbre en el área de Junior, pero Jermein Zidane Peña rechazó de todo, Monzón iba a todas por arriba (a pesar de una acción en la que se vio acelerado y aparatoso) y los laterales, Guerrero y Suárez, permanecieron atentos a los cierres.
Pero Didier Moreno y Guillermo Paiva también se pusieron el overol y aportaron bastante en esos momentos de bombardeo tolimense. El equipo estaba unido y luchando cada pelota como si fuera la última.
En el momento en que los pupilos de González amenazaban con empatar, Junior se sacudió y armó una jugada ofensiva que terminó en el gol de Castrillón, en el minuto 36.
El antioqueño redondeó una faena en la que participaron vistosamente Enamorado, Guerrero y Paiva. Otro golazo desde la concepción colectiva de la jugada.
Con el impulso anímico de ese tanto, que volvió a sumir en la desconfianza al Tolima,llegó el tercero. Una asistencia punzante de Didier a la que llegó puntual Enamorado, significó el 3-0.
Fue tan efectiva y bella la recepción, la manera en que se perfiló y el avance de Enamorado como lo fue su definición ante Volpi. Un toque sutil por encima del buen cuidapalos extranjeros.
El 3-0 prendió un carnaval monumental de bengalas, cánticos, gritos, júbilo, felicidad, emoción. Latían las tribunas del ‘Metro’ en medio de tanta dicha y orgullo por ese equipo que aplastaba a su adversario y le acomodaba tres goles en una final.
🏆⚽¡JOSÉ ESTÁ ENAMORADO DEL GOL! Doblete del atacante y Junior golea 3 a 0 a Tolima en el Metropolitano.#LAFINALxWIN pic.twitter.com/pNok7N1mJp
— Win Sports (@WinSportsTV) December 13, 2025
En el segundo tiempo, González movió el banco y mandó a la cancha a Velásquez en lugar de Junior Hernández como si los estragos de Enamorado fuesen culpa de él y no de la lucidez del 10 atlanticense.
También envió a Sebastián Guzmán en reemplazo de Rovira. Hubo una reacción desde la posesión del balón. Los Pijaos empezaron a darle manejo al esférico y a arrinconar a Junior, que también asumió una posición más sobreprotectora de su ventaja.
Se hacía evidente que podía llegar un gol visitante, aunque no generaba opciones realmente nítidas.
En el peor momento de Junior, Alfredo Arias decidió enviar al terreno de juego a Teófilo Gutiérrez en el puesto de Paiva. Parecía una sustitución precipitada, pero Teo cambió el decorado del juego con su experiencia.
El veterano ídolo de Junior propició la expulsión de Guzmán y de inmediato le apagó el fútbol y las esperanzas al Tolima.
Junior comenzó a controlar la pelota, se escuchó el ole en la tribuna y Canchimbo, Guerrero y Esparragoza estuvieron a punto de anotar el tercero. Volpi impidió que se elevara el marcador con una atajada salvadora ante Canchimbo.
Arias refrescó a su equipo y ninguno desentonó, todos entraron conectados y haciendo su aporte para este equipo que está cerca del título (todavía faltan 90 minutos) y que tiene a todos sus fanáticos enamorados.
Fuente cortesía El Heraldo
Nota: Rafael Castillo Vizcaíno.

