Atlético Nacional comenzó pisando duro en el cuadrangular A de la Liga BetPlay, al derrotar un gol por cero al América de Cali y se acomodó en la primera posición del grupo con el mismo puntaje del Junior de Barraquilla.
El gol del equipo verdolaga llegó al minuto 73 de juego, mediante un cabezazo de Matheus Uribe, después de un complicado juego ante el equipo vallecaucano.

Qué manera de empezar los cuadrangulares, el clásico entre caleños y paisas no defraudó y nos regaló un duelo cargado de tensión, historia y, sobre todo, una explosión de alegría al final. En la primera fecha de esta fase semifinal de la Liga BetPlay, Atlético Nacional se impuso 1-0 sobre el América en un Atanasio Girardot que fue una caldera. Victoria sufrida, pero que vale oro puro para la ilusión verdolaga.
El partido fue un verdadero ajedrez; ambos equipos se respetaron, sabiendo que el margen de error en esta fase es mínimo.
El Verdolaga obligado a ganar en casa para meterse en la pelea desde el inicio, intentó llevar la iniciativa. El Escarlata, con la jerarquía de un grande, apostó por el orden defensivo y las transiciones rápidas.
La primera mitad fue intensa, con mucha lucha en el mediocampo y pocas opciones claras de gol. Los duelos individuales eran titánicos, con los volantes dejando la vida en cada marca. El arquero del América, Jorge Soto, tuvo una noche inspirada, frustrando varios intentos del ataque nacionalista. Por su parte, Harlen Castillo también demostró su categoría, manteniendo su arco en cero con solvencia.
La tensión creció a medida que el reloj avanzaba. Los minutos pasaban y el fantasma del empate sin goles, un resultado que siempre es amargo en casa, sobrevolaba el Atanasio. Pero si algo tiene el fútbol, es que a veces nos regala finales de película.
Cuando el partido agonizaba y muchos ya firmaban la igualdad, apareció la magia y el coraje. Una jugada rápida, con el equipo volcado al ataque, terminó con un gol de cabeza de Matheus Uribe, quien logró vencer la resistencia de Soto. ¡Golazo! (Minuto73’).
El Atanasio se vino abajo. El grito de gol fue un desahogo monumental, la ratificación de que la mística de los grandes sigue intacta. La victoria 1-0 no solo significó sumar los primeros 3 puntos en el grupo, sino que fue un golpe anímico importantísimo sobre su máximo rival en esta fase definitiva.
El equipo de Diego Arias arranca con pie derecho y se posiciona como un contendiente serio. El camino a la final es largo y difícil, pero ganar este clásico en la primera jornada es la inyección de confianza que todo campeón necesita.
En la segunda fecha Nacional jugará ante el Medellín y América serpa local ante el Junior, en juegos a disputarse el próximo domingo.
Fuente Cortesía Q’Humo Medellín.com

